VISHUDA CHAKRA (ESPAÑOL)

 

INTRODUCCIÓN A LA REALIDAD CIENTÍFICA DE LOS CHAKRAS O CENTROS ENERGÉTICOS; LA GARGANTA COMO PORTAL PARA EL AUTOCONOCIMIENTO Y LAS POSTURAS DE YOGA QUE LO ESTIMULAN

 

No pude tener mejor maestro de Reiki, Sergio Kostritski. Diplomático desde muy joven, tuvo una revelación que cambió absolutamente su relación con la realidad y su dirección en la vida. Un buen día se abrió su tercer gran centro energético conocido como Plexo Solar y en sánscrito como Manipura Chakra. No recuerdo bien los detalles, pero sentía mucha luz en el centro de su estómago. Esa Luz le brindó información en una experiencia que no pudo calificar de otra manera sino como divina. A partir de entonces, la naturaleza viajera de su profesión le permitió investigar a conciencia el conocimiento que iba más allá de cómo funcionamos a nivel físico en donde fuere. Durante los años que fue cónsul del Perú en China, aprendió técnicas que cualquier ser humano podría calificar como de ciencia ficción. Durante clases, lo hemos visto aumentar visiblemente energía saliendo de su séptimo gran centro energético o Sahasrara Chakra, ubicado en la coronilla, como si su cráneo estuviese encendido en un fuego (de luz) cada vez más alto. Luego hizo descender esa energía hasta hacerla desaparecer ante nuestros ojos. Durante nuestra segunda iniciación, varias personas vimos numerosos Maestros de Luz en vestimentas sacerdotales, presentes sólo en sus cuerpos astrales, caminando entre nosotras. La cantidad de energía que se movía en nuestras iniciaciones no tenía comparación con nada que hubiese vivido ni sentido antes, en esta vida, al menos.

 

Si tienes contraindicaciones para las posturas que te sugiero, puedes realizar este estiramiento con algún tipo de soporte para tu cuello, sin que te cause dolor, durante 6 a 10 segundos, y si te hace sentir bien, puedes practicarlo hasta 20 segundos, dos veces al día. Siempre entra y sal de las posturas con mucha paciencia, sintiendo tu cuerpo. No realices nada que te cause dolor o que sientas que puede agravar una lesión.
(En la foto, tengo la boca abierta para dar indicaciones. Realiza la práctica con los labios juntos)

QUÉ ES UN CHAKRA

Para hablar del concepto de centro energético o chakra, hay que entender que éstas no son ideas creadas por seres altamente ignorantes y supersticiosos de un pasado remoto que no tenían idea alguna de qué cosa es ciencia. Quien pueda pensar algo parecido necesita hacer un poco de investigación. De hecho, la civilización india, históricamente la más grande promotora de estos conceptos desde hace milenios, fue y sigue siendo una cultura de grandes científicos. Como su percepción de la realidad era distinta a la del ser humano moderno común (la percepción no es algo natural sino una habilidad aprendida según la información que recibimos mientras vamos creciendo), podían ver cuerpos energéticos, que hoy por cultura hemos desaprendido de ver o de identificar porque no nos lo mencionan o porque directamente nos instruyen que tales posibilidades no existen. Hoy hay aparatos electrónicos que miden no solo las frecuencias luminosas y electromagnéticas que emite cualquier cuerpo (como para obtener un encefalograma o lectura de la actividad del encéfalo, por ejemplo), sino que pueden medir las frecuencias sutiles que emitimos en otros niveles de existencia (sobre esto, más adelante). Algunos de estos aparatos como por ejemplo el Sputnik, de tecnología rusa, pueden medir las frecuencias del campo vital que emite el cuerpo humano de un paciente antes de cirugía. Si el paciente tiene un campo energético muy débil, no le operan pues no tiene suficiente energía para recuperarse[1]. Hay otros aparatos que miden cosas aparentemente menos new age como las tecnologías creadas por el Heart Math Institute que abarcan innumerables funciones vitales como variabilidad cardiaca, coherencia cardiaca y cerebral, etcétera, con programación que detecta nuestras funciones con, por ejemplo, tecnología de Bluetooth.

Ya que hemos establecido que estamos hablando de manifestaciones energéticas capaces de ser registradas tecnológicamente, podemos entrar al concepto de Chakras con menos preocupación y escepticismo, aunque, claro, siempre es bueno escuchar y mantener la puerta de la duda abierta por si acaso. En todo caso, lo que pueda decir aquí no lo tienes que creer, y sin embargo te invito a que practiques alguna habilidad energética y después de un tiempo puedas obtener de primera mano tus propias conclusiones. Para algunas personas esta modificación del estado de la percepción es rápido; para otras puede demorar años, dependiendo de lo que tengan que trabajar a nivel interior. Es que percibir energía es parecido a ser un esquimal y ver numerosos tonos distintos de blanco y adjudicarle a cada tono específico (para esta comunidad, colores específicos) un nombre. Para ver lo que cada una de estas personas ve, necesitamos reeducar nuestra percepción. Lo mismo sucede con la realidad energética. Pronto te darás cuenta de que no solo la tecnología reconoce patrones energéticos; los humanos tenemos todo el equipo biológico para hacer esas mismas lecturas.

Según qué tan desarrollado sea tu sentido de la percepción energética, o por dónde se oriente ésta, puedes llegar a ver que tenemos varios cuerpos. De momento, para lo que nos interesa, diremos que, de nacimiento o luego de cierto tiempo de práctica, podemos percibir cuatro cuerpos de los siete que oficialmente tenemos. Nuestro cuerpo físico es el primer cuerpo, y es la vestimenta o el vehículo con el que nos movemos en esta vida en particular en la que yo, ahora, soy Úrsula. El segundo cuerpo perceptible es el etérico o vital (el nivel en donde operan los chakras) llamado así porque es producto del cuerpo físico y lo regula. Se genera un nuevo cuerpo etérico cada vez que tomas nueva forma, y decae con la muerte del cuerpo. Luego están los cuerpos: mental (que muchas veces es lo que ven los clarividentes), que los egos gustan de manipular para subsistir y desde donde obtienen y se alimentan de nuestra energía vital, y astral. El astral, es ese cuerpo con el que vivimos sueños no mentales, con el que percibimos cosas que vendrán, por medio del cual podemos tener comunicación con lo energético superior y también con seres o energías de diferente frecuencia vibratoria. Es uno de nuestros vehículos de viaje y comunicación, si se quiere.

En anatomía física, podemos verificar que nuestro sistema nervioso central se divide en numerosos conjuntos nerviosos que conectan zonas y sistemas específicos de nuestro cuerpo con nuestra médula espinal y el encéfalo. A estos conjuntos se les llama plexos nerviosos. A nivel energético, los plexos nerviosos, con su constante actividad electromagnética se les percibe como bolas de luz, a veces como temperaturas, etcétera. No es es del todo cierto que todos tengamos chakras. Según nuestra conciencia y nuestra armonía a nivel emocional es que se van formando como centros organizados de energía. Si meditas constantemente con la intención de fortalecer tus chakras (tu salud, y tu estado mental emocional) puedes haber generado un funcionamiento moderado de estos centros reguladores de energía, e incluso sentir la dirección sobre la cual están girando.

Es un ida y vuelta. Los chakras se desarrollan en cuerpos altamente armónicos, es decir, que gozan de coherencia a nivel neuronal, nervioso y cardiaco. Y viceversa. Lograr un óptimo estado de los chakras como del cuerpo físico es quizá el fin principal del Hatha Yoga pues esa armonía facilita enormemente el desarrollo espiritual. Nuestra expresión física como cuerpo armónico o caótico está íntimamente relacionada con nuestro desarrollo interno. El trabajo en el desarrollo de los chakras, mejora o incluso lleva a nuestra perfección la expresión física (la expresión genética y sus consecuencias). Con esto quiero decir que si estás muy enferma(o) y alguien te dice que te va a alinear los chakras, quizá no sea exactamente lo que hará. Mucha gente trabaja con energía sin saber realmente cómo funciona el trabajo energético que ha aprendido a aplicar, pero aún así tiene buenos resultados. A mí me ha pasado tanto al dar como al recibir sanación. De la misma manera, ahora abundan las personas que dicen acceder a registros akáshicos, pero hace falta tener un conocimiento interior ilimitado y tener cuerpos vitales poderosos para acceder a ellos, es decir, haber tenido algún tipo de iniciación espiritual (y ninguna iniciación real se da en el plano físico). Además, me parece correcto decir, que por más que yo pague a alguien para que acceda a mis registros, depende mucho de lo que me toque vivir y aprender en esta vida, que alguien que realmente los lee pueda hacer lo que le estoy pidiendo.

 

VISHUDA CHAKRA

La garganta no solo representa, sino que es un vehículo de palabra, de todo lo vinculado con ella. Su estado de salud y el de los órganos circundantes (los del olfato, vista, oído, etcétera) tiene relación directa con emociones que son resultado de lo que ocultamos a nivel verbal, lo que hemos callado, lo que decimos para luego arrepentirnos, con haber abusado psicológicamente de terceros, pero principalmente, de una misma, y por supuesto, relación con aquello a lo que le hemos echado tierra encima con la intención de que desaparezca. Una noticia: eso nunca funciona. Hablo por experiencia. La garganta tiene relación directa con la sabiduría, por lo tanto, con el corazón, que es conector entre los planos físico y sutil, así como un regulador de este intercambio. A nivel sutil conecta el elemento aire, del cual el corazón es el centro, y el akash o lo que los esoteristas antiguos solían llamar éter o agente universal, el responsable de que haya karma y dharma.

Esto quiere decir que un problema auditivo, desde una infección hasta una disminución de la facultad de oír, no solo podría deberse a algo que me cuesta o rechazo escuchar, sino también a una extensión de un desequilibrio energético en la zona de la garganta. Por eso es, básicamente, por lo cual ningún medicamento ni farmacológico ni natural funciona igual para cada caso. Todo responde a las especificidades de lo que cada quien experimenta.

 

EJERCICIOS PARA VISHUDA CHAKRA

Para mantener el chakra Vishuda en buen estado, o promover su recuperación, se puede combinar siempre uno o dos ejercicios sencillos de Pranayama o respiración consciente, para los cuales no necesitas instrucción especial, con al menos una postura de Yoga que actúe directamente sobre la garganta. Me veo en la obligación de advertir que, una vez que empieces a realizar estas posturas, es probable que te encuentres diciendo cosas sin pensarlo dos veces que antes considerabas que se pasaban de la raya a alguien que lo necesite. A mí, por ejemplo, se me hizo más fácil empezar a mandar a la mierda a algunas personas. En realidad, no es que tu reacción sea violenta en sentido interno, sino una llamada de atención a la mente de quien está ejerciendo una falta sobre ti o sobre alguien más. Porque, vamos, a nadie se le hace un bien cuando se le permite que sobrepase la línea de nuestra libertad ni de nuestra salud en ningún sentido. En algunas tradiciones budistas, por ejemplo, es normal que haya un cuidador blandiendo un palo durante las sesiones de meditación. Si alguien se rasca o se mueve, le cae un golpe. No entendía eso, hasta que conecté que es lo mismo que sucede con la psicología conductiva. El golpe no es un castigo, sino una llamada de alerta para que la mente se acostumbre a realizar el ejercicio que se requiere de ella en lugar de dar pie a lo que la hemos acostumbrado a hacer: divagar.

El primer ejercicio es la base de todo. Por cinco minutos, mantén una respiración cada vez más lenta y profunda, inhalando y exhalando exclusivamente por la nariz. Una vez que hayas llegado a un mínimo de respiraciones con el cual te sientas en comodidad, mide tus respiraciones por minuto. Te pones un temporizador que suene cada 60 segundos (hay apps de reiki disponibles en Google Play que puedes programar con campanas de diferentes tipos e incluso música relajante), y mantén ese ritmo. Si llegas a los cinco minutos o más (mientras más tiempo hagas esta respiración, mejor) es muy probable que sientas que tu cerebro se enfría (literal), que por primera vez en la vida sientes sangre circulando por las venas, cambios de temperatura en el cuerpo, o quizá solo encuentres calma. Hay gente que no siente ningún cambio en absoluto. Yo por ejemplo. Sin embargo, la práctica diaria me ayudó a obtener cambios sustanciales en mi vida tanto en cuanto a mi salud como a mi interior. Soy un ser muy distinto de quien era o de como estaba antes de iniciar estas técnicas.

El segundo ejercicio de respiración es igualmente sencillo. Una vez que llegaste a mantener los cinco o veinte minutos de esa respiración lenta y profunda, que vamos a llamar consciente (y que técnicamente se llama resonante) respiras durante dos minutos a reloj tapándote la fosa nasal izquierda, y de inmediato dos minutos tapando la fosa nasal derecha. El cambio se hace con una exhalación. Terminas de exhalar, tapas ambos orificios nasales, luego despejas la fosa izquierda y haces los dos minutos finales. Con este tipo de respiración ejerces un balance radical en tu sistema nervioso central y en tus canales sutiles entre las energías solar y lunar, masculina y femenina de todo tu sistema.

Por último, puedes practicar, por ejemplo, cualquier variación de Sarvangasana o Vela, en la que la barbilla se pegue durante un minuto o más al pecho.

 

Sarvangasana
Como en esta foto, puedes mantener el soporte de tu cuerpo con una presión de tus brazos sobre el mat, o bien puedes poner tus manos como soporte de tu espalda y apoyas los codos sobre el mat. Para estimular Vishuda necesitas presionar ligeramente la barbilla contra el pecho.

Idealmente, procura que las caderas estén alineadas con los hombros, y que la espalda esté lo más vertical posible. Puedes empezar flexionando las rodillas en algo parecido a una posición fetal, y con el tiempo ir estirando las piernas de manera que al final quedas absolutamente vertical y perpendicular al piso. Lo importante es que el soporte del cuello sea seguro y firme (un cuello débil no es bueno para esta postura), e ir incorporando un trabajo consciente de toda tu coraza abdominal.

Este tipo de posturas, como todo en Hatha Yoga, requieren de realizarse lentamente al entrar, mantener al menos un minuto ajustando y respirando, y salir aún más lento, en especial porque se activan los músculos de la espalda de una manera poco usual y necesitan volver con mucha paciencia y cuidado. Hay una contracción de los músculos de la garganta, así como de la circulación a nivel físico y sutil. Una vez que sales de la postura de contracción, lentamente debes hacer una contrapostura de expansión, en este caso, de la garganta, pecho y abdominales. La contrapostura de Sarvangasana es pez o Matsyasana, y si estás bien caliente o tienes el estado físico adecuado, puedes hacer Chakrasana.

 

Matsyasana, contrapostura de Sarvangasana

 Mismas indicaciones, entra, mantente y sal lento y con cuidado. Nada te debe doler. Sentir esfuerzo, sí, sentir que estiras, mejor, pero ningún dolor. Ambas posturas trabajan liberando la energía estancada de Vishuda que tu variación de Sarvangasana estimuló, y ahora esas emociones y bloqueos salen despejando canales y habilitando el área para recibir luz, en el sentido más literal de la palabra.

 

CONTRAINDICACIONES

Para los Pranayama o ejercicios de respiración consciente no hay contraindicaciones, cada quien los puede ir realizando de acuerdo con sus posibilidades físicas del momento, teniendo claro que hay que avanzar de a pocos, pero sostener una disciplina diaria.

No pueden realizar Sarvangasana ni sus variaciones, incluidas todas esas posturas en donde el cuello está apoyado sobre el piso y exigen que la barbilla se pegue al pecho, quienes tienen dolor al empezar a hacerlas, o quienes tienen lesiones y, por lo tanto, prohibiciones médicas o fisioterapéuticas.

No fuerces nunca una postura.

TRABAJO EN PLANOS SUTILES

Si quieres lograr resultados específicos, puedes trabajar con una intención o un mantra mental. Supongamos que quieres tener una palabra sabia; saber qué decir, cuándo decirlo, a quién, y tener la sensibilidad suficiente para callar. Escoge un símbolo que para ti englobe todas esas intenciones y medita en él sintiéndolo ubicado en tu garganta antes de realizar las posturas para Vishuda Chakra. También puedes tener tu intención repitiéndola como un mantra mientras estás en postura, o respirando conscientemente. Nada relacionado con la mentira funciona con estos ejercicios, muy por el contrario, te acercan a ser una persona más valiente y veraz.

INFLUENCIA EN OTRAS PERSONAS

Quizá alguien esté con problemas en la garganta. Puedes visualizar a esa persona feliz, en absoluta armonía, con la garganta llena de luz, por unos dos a cinco minutos diarios. Mientras más personas realicen esa visualización, mejor, en especial si suelen rezar por otros o realizar ejercicios de sanación.



[1] Cita tomada del libro Sobrenatural, Cómo gente corriente realiza lo extraordinario (Becoming Supernatural: How Common People are Doing the Uncommon, Hayhouse editado para Kindle) del Dr. Joe Dispenza.

Comments